Los opositores no ganan para disgustos. Los motivos para caer en el desanimo son muy variados, «pucherazos», trampas varias y ahora fallos informáticos.
Esto es lo que ocurrió en las oposiciones para cubrir 18 plazas de administrativo en la Universidad de la Laguna. El problema surgió en el primer examen (tipo test de 100 preguntas) el que congregó a cerca de 1200 aspirantes dando como resultado 321 aprobados y más de 800 suspensos.
Hasta aquí todo tiene aparenta normalidad, la diferencia con un examen normal estribó en la avalancha de personas que se presentaron en el Registro del Rectorado de la Universidad de la Laguna al no estar conformes con la nota obtenida.
El tribunal antes tantísimas quejas actuó de oficio y comprobó que por un error informático una columna del examen, la que correspondía a las preguntas de la 41 a la 60, se quedó sin corregir.
Una vez subsanado este error han aprobado 200 personas más y otras que ya habían aprobado han visto como sus notas han subido sustancialmente.
La Universidad ha considerado conveniente retrasar la segunda prueba del examen para compensar a los aspirantes que se daban por suspendidos
Fuente: abc.es